lunes, 12 de abril de 2010

La Reseña: Franz Ferdinand en Concierto

Por: JL


Todo pintaba como una típica velada de concierto en el Auditorio Nacional el pasado sábado 10 de abril. Un gran número de asistentes podía observarse a la entrada del recinto; las edades eran indistintas: jóvenes de quince años caminando a un lado de no tan jóvenes oficinistas cuya pasión por la música aún sigue vigente.
El boleto indicaba como hora de inició las 8 pm. "¿Sabes si va a abrirle alguien a Franz? No, la verdad no" . Lamentablemente, la respuesta a mi pregunta fue si. Una banda salida de la nada se encargó de participar como acto telonero; ni siquiera vale la pena comentar sobre su nada propositivo sonido.
9 pm, y Franz Ferdinand aún no aparecía. Se hizo la obscuridad. Una pista a todo volumen indicaba la inminente aparición por parte de los escoceses. De pronto, Franz Ferdinand sobre el escenario haciendo lo que mejor sabe hacer: ponernos a bailar con sus sensuales y enérgicos ritmos. Una canción, dos canciones, y la euforia del público se vio claramente contagiada en Alex Kapranos, frontman de la banda. "¡¡Hay suficiente espacio aquí adelante, vengan, vengan, vamos a reventar esta noche!!" En cuestión de segundos, una oleada de fanáticos se dejó ir a un costado del escenario y a los pasillos, transformando el paisaje en algo nunca antes visto en el Auditorio Nacional.
Y por supuesto, lo inevitable sucedió: adiós sonido. Un montón de abucheos no se hicieron esperar, y por unos minutos la banda desapareció del escenario. "¡¡Franz, Franz, Franz!!" se pudo escuchar entre los múltiples aplausos por parte de los presentes. Al cabo de cinco minutos, Alex Kapranos se acercó a su micrófono para decir "Lo siento, únicamente nos dejaron tocar dos canciones más...".
Kapranos mintió, ya que pudimos cantar y bailar junto a la banda por más de hora y media de concierto, el cual estuvo bastante equilibrado en cuanto a la selección de temas de sus tres álbums, siendo Take Me Out, This Fire y Do You Want To los más coreados.
La noche tuvo su momento de originalidad, al haber convertido los cuatro miembros de la banda el tema Outsiders en una batucada al utilizar una serie de tambores colocados frente al escenario.
Para el encore, regresaron con una versión tranquila de Walk Away, siguieron con un cover de All My Friends perteneciente a LCD Soundsystem, y finalmente cerraron con una versión mega extendida de Lucid Dreams, siendo los sintetizadores los principales protagonistas de esta última canción.

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